Main | Juego de corazones (I) »

19 de Diciembre del 2003

Carta de un café

La situación era desesperada. El día anterior se me dio mal el juego y perdí varios miles a lo largo de la noche; en un último intento por recuperar mi dinero me jugué el todo por el todo. Y perdí. Así que ya les debía mucho más de lo que podía pagar, más aún de lo que valía mi propia vida. Ya sabemos lo que le hacen a los deudores, así que jugué un nuevo farol citándoles otra vez en mi casa. Tal vez pudiera ganar lo bastante para cubrir parte de mi deuda. Y si perdía... Bueno, ya debía lo bastante para saber que no iba a ver muchos amaneceres más si no ocurría un milagro.

sirvasecaliente.jpg

Avisé a un viejo amigo mío: necesitaba dinero y una pareja para la partida, ya que mi habitual compañero se negaba a terminar buceando con zapatos de cemento. En el centro de la mesa nos esperaba una baraja sin comodines. Allí estaban los dos, el Cortao y el Negro: malencarados, criminales, asesinos y tahúres. Dos auténticos tipos duros. Y frente a ellos, mi amigo el Largo y yo. El Largo me había dicho, Solo, tío, cómo te has dejado embaucar por ese par de hijos de puta. Todos sabemos a qué se dedican y a cuántos han aguado ya. Pero joder, Largo, yo qué coño sabía, parecía dinero fácil. Vale, tío, no te preocupes, yo te ayudaré, verás como esta noche todo sale bien.

Empecé repartiendo yo. El Cortao y el Negro pidieron una carta cada uno y el Largo no quiso ninguna. Sus ojos me decían que tenía una buena jugada, así que le cubrí el culo en las apuestas. Cuando se descubrieron las cartas el Negro y yo nos habíamos plantado y había quinientos encima de la mesa. Debe de tener por lo menos un trío, pensé; y una mierda para mí. El hijoputa del Largo enseñó con cara de felicidad suprema una asquerosa pareja. Habíamos perdido la primera mano de la noche.

No sería la última. Yo gané algunas, pero cuando tenía alguna buena jugada se veía invariablemente descubierta por el gesto del Largo de "soy el mejor jugador de póker del mundo". Así perdimos no sé cuántas, hasta que mi amigo había perdido diez mil, todo su dinero. Y mi deuda seguía igual. Pedí un descanso y agarré a mi compañero de juego. Hijo de la gran puta, le dije, cuando decías que sabías jugar al póker a qué te referías. Y me contestó que, bueno, un trío eran tres cartas iguales, y era más que dobles parejas, y un póker era lo máximo que se podía hacer, bueno, salvo la escalera de color, pero eso era muy difícil.

Así que ya estaba todo perdido. En fin, al menos habría que terminar la partida. El póker no se puede dejar a medias. Echamos una mano más, que perdimos otra vez. Al Largo ya no le quedaba dinero, y me disponía a dar por terminada la sesión, cuando sacó una libreta de cheques. Hemos perdido mucho dinero esta noche, dijo, y mi amigo os debe mucho más, pero siento que mi suerte está a punto de cambiar. Pensé que se había vuelto loco. Firmó un cheque por treinta mil: todo esto contra los... quince mil nos habéis ganado ya, ¿no?, pues contra treinta mil. Doble o nada a una sola mano, ¿eh?, eso es. El Cortao y el Negro se relamieron, el tonto número 1 de la noche les iba a costear la jubilación. Hasta le dieron la baraja al Largo para que fuera él quien repartiera las cartas y así viera que no había trampa ni cartón.

A partir de ese momento todo fue magia. El Largo arrugó la cara y cambió tres cartas; yo pedí dos y eso no mejoró mucho la pareja de mierda que tenía; el Negro y el Cortao se quedaron tal cual. Enseñaron las cartas, todo sonrisas de oro: póker de reinas y ful de reyes. El Largo hizo cuentas mentales y dijo, eh, buena mano, pero una escalera de color es más, ¿verdad? Y allí estaban, los cinco números más bonitos que he visto en mi vida, todos seguiditos y del mismo color. Los dos tahúres se fueron con un palmo de narices y quince billetes menos en el bolsillo. Mientras los repartíamos le pregunté al Largo qué cojones había pasado. Bueno, me contestó que a ver si me creía que era gilipollas, que claro que sabía jugar al póker. Y bastante mejor que esos dos papanatas. Pero si jugaba duro desde el primer momento le iban a acusar de tramposo y podían terminar a tiros, o negarse a jugar más y querer liquidar la deuda en el momento. Así que mejor darles un golpe de efecto en el último round que los dejara KO. ¿Qué había hecho? Muy fácil... Colocarse las cartas al barajar, coño, que aprendió cuando trabajaba en el Casino aquél. Y me había engañado a mí también para que la cosa sonara creíble. ¿Y si no le salía bien y perdían? El cheque no tenía fondos y los bancos no abren hasta la mañana. Para esa hora ya estaríamos los dos muy lejos, un tiempecito de vacaciones no viene mal. ¿Y si no le hubieran dicho a él que barajara? Bueno, tenía pensado pedir la baraja él mismo pero al final no hizo falta, y si se negaban... Siempre guardaba una carta en la manga. Un comodín en una baraja sin comodines es una ventaja muy grande. Y ahora, Solo, me dijo, tenemos que resolver un asunto: invítame a un coñac, y a ver si así empiezas a llamarme Carajillo.

Qué tío. Una carta en la manga. Se había jugado el cuello tan tranquilo porque tenía una carta en la manga. Nunca he visto un café tan valiente como él.

Málaga, otoño del 2003

Como curiosidad: en casi toda España, para tomar un café basta con pedirlo solo o con leche. En Málaga hay unos cuantos nombres más según la proporción del café y la leche: nube (muy poco café), sombra (poco café), mitad, cortado (poca leche) largo (muy poca leche) y el solo o negro. Además puedes pedirlo doble (en un vaso más grande), y por supuesto en taza o en vaso, caliente o con hielo. Ah, y el carajillo: café con un chorro de coñac (sí, eso que algunos snobs se empeñan en llamar "café irlandés").
Probablemente parezca una chorrada (de hecho, seguramente lo sea), pero da gusto, en esas mañanas de lluvia de la Facultad, beberse un cafelito en el bar justo como a uno le gusta prepararlo en casa.

Dicho por Santo at 19 de Diciembre 2003 a las 12:38 AM

Diverso Variable: Comentarios >
Comentarios: Carta de un café

¿Quién diría que un poco de café con un poco de leche podía llamarse de tantas formas?
Buen relato.

Fran.

Escrito por FraN a las 19 de Diciembre 2003 a las 06:36 PM

Hum...

¿Seguirá dando fallos esto de los comentarios? ^^U

Un saludo a todos los que firmen en este primer post del blog. :)

Escrito por Santo a las 20 de Diciembre 2003 a las 01:24 AM

Las cosas que hace la cafeína :P

Bonita historia :)

Un Saludo.

Escrito por Tom Bombadil a las 25 de Diciembre 2003 a las 08:32 PM

It's serious http://www.arsvivendi.com/verlag ">is generic paxil cr available 318 Prescribing Provider License not in Active Status

Escrito por Plank a las 22 de Enero 2013 a las 06:45 AM
Escribir comentario









¿Recordar mi informacion personal?